Es evidente la equivalencia entre interpretación y voluntad de poder en Nietzsche, en donde la perspectiva de liberación, abierta por la crítica de las hipóstasis metafísicas, se presenta como el corolario de una dialéctica del dominio. También sigue estando completamente abierto el problema de si Nietzsche, acogiendo un modelo de relaciones sociales para describir la transmisión de las fuerzas, no depende también, en la interpretación de la naturaleza, de aquel esquema antropomórfico que había reprochado a Schopenhauer.