En El engaño, Philip Roth disecciona, mediante retazos de conversaciones de dos amantes, las pasiones que exponen al adulterio.
«Con el amante la vida cotidiana retrocede», escribe Philip Roth, y exhibiendo su habilidad como genial observador de la pasión humana, presenta en Engaño el mundo claustrofóbico de las relaciones adúlteras con una franqueza sin parangón en la ficción norteamericana.
En el centro de Engaño se encuentran dos adúlteros en su escondite. Él es un escritor americano de mediana edad, llamado Philip y que vive en Londres. Ella es una elocuente, inteligente y bien educada mujer inglesa atrapada en un matrimonio humillante al que, con solo treinta y tantos años, ya casi se ha resignado.
El ritmo de la novela está sostenido en conversaciones, principalmente las que mantiene la pareja antes y después de hacer el amor.
Este diálogo -ácido, rico, lúdico, inquisitivo- es prácticamente todo lo que hay en este libro, y todo lo que es necesario que haya.