Entre el instante en que Nietzsche recibe en Basilea el primer ejemplar de El nacimiento de la tragedia y en el que se apresta en Turín a corregir las pruebas de los Ditirambos de Dioniso, apenas han transcurrido dieciocho años. En este corto espacio de tiempo el filólogo Friedrich Nietzsche ha podido desentrañar la falsedad de ?nuestra? cultura actual, redescubrir el sentido original de lo dionisíaco, denunciar la amputación instintiva de la racionalidad, revelar los mecanismos lingüísticos de la consciencia y el pensamiento, bucear en los orígenes de la moral, perderse en la anulación del tiempo del eterno retorno, anunciar contra ?nuestra? decadencia la aniquilación de todo lo parasitario...