¿Cuál es el límite de la pasión?
El esperado desenlace de la trilogía más explosiva del verano.
Si compartir los sueños con un chico normal ya es complicado, hacerlo con Jude Ryder es casi una imprudencia. Apasionado, impulsivo y temperamental, Jude solo quiere vivir el presente -y esto no está nada mal, porque es un bombón-, pero Lucy sabe que para que lo suyo funcione deberán antes superar sus pasados. Y, claro, esto no es tan divertido como explotar su pasión como si no hubiera un mañana...
Además, cuando las vacaciones separen de nuevo sus caminos, tendrán que afrontar la pregunta definitiva: ¿está su amor escrito en las constelaciones o ha sido solo una estrella fugaz? Bella, inesperada, ardiente... y fulminante.