El periodismo zombi es el periodismo que se ha visto obligado a incorporar la voz del público en los medios de comunicación pero que no sabe qué hacer periodísticamente con eso. Es un periodismo que parece vivo pero que está muerto. Que balbucea, que trastabilla. Que no sabe cómo mejorar el producto periodístico con la integración de las voces de la audiencia. De esto trata este libro. Periodismo zombi en la era de las audiencias participativas analiza cómo es la participación de los ciudadanos en los diarios digitales europeos y propone algunas vías para convertir la participación del público en algo que mejore la oferta periodística que preparan los medios de comunicación. El periodismo zombi debe saber cambiar, debe saber derrumbar los viejos prejuicios que los periodistas tienen sobre el público y debe atreverse a integrar nuevos procesos y nuevas funciones que conviertan a los ciudadanos que forman la audiencia en colaboradores de los periodistas. En este sentido, la fórmula de este periodismo cambiante, del nuevo periodismo mutante, se basa en tres principios: el de comunidad, el de meta mediación y el de gestión del público.