RESUMEN: Montaigne es, además de un gran escritor, un filósofo, en la medida que algunos de los contenidos que aborda son filosóficos y en que, sobre todo, la forma que utiliza para expresarlos, el ensayo, es una forma filosófica. El artículo analiza en primer lugar qué son los Essais, obra singular en la que se desarrolla un tema único (Michel de Montaigne) sin un orden aparente pero con un proyecto de pintura de sí que exige continuas ampliaciones. En segundo lugar, se aborda la relación entre la forma del libro y la actividad filosófica. El libro es resultado de un proyecto, la pintura de sí, y éste supone una forma distinta de hacer filosofía y de abordar la cuestión de la identidad personal. Al ligar la identidad con el libro y el proceso de escritura, Montaigne entronca con algunas posiciones actuales como la de la identidad narrativa. Pero además, y en tercer lugar, se comenta el contenido de los Essais. Aunque Montaigne siempre escribe sobre sí, haciéndolo aparecen temas y actitudes que configuran un pensamiento filosófico: sobre el conocimiento (escepticismo); sobre la religión (cuestión de fe); sobre el hombre en sí (vindicación del cuerpo); sobre la educación (formación del juicio); sobre la felicidad (relación virtud-fortuna); sobre la política (desmitificación de la ley); sobre los otros (relativismo y humaine condition). El artículo finaliza con una breve fortuna de los Essais y relacionando la forma del libro con su contenido, cuya unión conforma la filosofía de Montaigne.