Al relato de la madre, en el que cuenta cómo se empleó a fondo en ir cuidando la salud de su hija no sólo en el campo de su alimentación, sino afectiva y psicológicamente, para que no se sintiera distinta, se une en estas páginas el de Ximena, que narra el día a día de una enfermedad crónica: los chequeos a los que debía someterse, su adaptación al colegio, lo que suponía salir de viaje, sus transgresiones. También otros celíacos dan aquí su sincero testimonio, así como útiles consejos para sobrellevar mejor los problemas derivados de su condición.
Un libro que transmite una experiencia y que será una ayuda inestimable para todos los padres que van a empezar una nueva aventura: la de vivir con un hijo celíaco.
La importancia de un buen diagnóstico
Alimentos permitidos y prohibidos
Ser celíaco en el colegio
Cómo cambia la vida familiar
Fiestas, viajes, comidas en restaurantes