Ahora que nos quieren hacer creer que todo ya pasó, me siento casi con la obligación moral de contarles cómo funciona verdaderamente el mundo de las inversiones financieras, para intentar evitar que nunca más tengamos esa sensación de que nos han vuelto a engañar. Durante los últimos años, millones de personas han vivido la frustración de sentirse indefensos ante las pérdidas en sus inversiones, de haber dejado marchar los ahorros que tanto esfuerzo costó reunir. La creencia en falsos mitos y el desconocimiento de las imperfecciones de los mercados financieros, han motivado el no llevar a cabo un adecuado análisis de riesgos en las decisiones de inversión. El no haber evaluado los intereses enfrentados en materia de asesoramiento, la creencia de que la economía es una ciencia sin margen de error, y una falta de sentido crítico ante la responsabilidad de uno mismo, han originado un panorama de desconfianza y escepticismo. Este libro trata de dar solución a los nuevos retos inversores, presentando a la educación financiera centrada en el análisis de riesgos y a la responsabilidad sostenible como alternativas en el cada día más complejo mundo de las finanzas.