Tras la aparición del cadáver de una desconocida, la Sevilla de los años anteriores a la Expo del 92 se convierte en escenario de una batalla callada, terrible e inaudita. Por una parte, la policía, asesorada por un erudito especialista en esoterismo y demonología, quien a la postre se convertirá en el protagonista de la obra. Por otra, una agrupación luciferina de carácter conventual desarrolla execrables actividades, cuya oculta finalidad, sólo podrá entreverse en los estertores del fin del milenio. El relato de esta lucha nos conducirá no solo por la literatura demoníaca, la parafernalia satánica y las actividades paranormales de sus miembros, sino por la arquitectura oculta de la ciudad, los legajos de los Archivos de Indias y Simancas y la investigación histórica sobre la Inquisición.