Emile Erckmann (1822-1899) y Alexandre Chatrian (1826-1890), escritores alsacianos, aunaron sus nombres bajo el seudónimo de Erckmann-Chatrian para publicar una serie de cuadros históricos ambientados en las guerras napoleónicas -como hicieran Tolstoy, Stendhal, y otros maestros que escogieron esta gran contienda como telón de fondo para sus mejores tramas-, serie iniciada en 1862 con el presente volumen, La invasión, o el loco Yégof, al que seguirían Madame Therese o los voluntarios de 1792 (1863), Historia de un recluta de 1813 (1864), Waterloo (1865), y otras.
La invasión, o el loco Yégof muestra la retirada del ejército derrotado de Napoleón vista desde el sufrido país fronterizo de Alsacia (que en la historia reciente ha pertenecido tanto a Alemania como a Francia), en tono escéptico y antimilitarista. La Alsacia siempre fue un país misterioso, y los Vosgos, escarpados y selváticos, son cuna de leyendas y mitos. Un viejo loco, estrafalario y terrible, Yégof, recorre la comarca de la Serranía coronado de hojalata y perorando sobre castillos, duques, vasallos, jefes, posesiones y combates. Recuerda las terribles batallas que allí tuvieron lugar mil setecientos años atrás y proclama que ha llegado el tiempo de la venganza: los del norte, los suyos, vuelven. Siguiendo ancestrales costumbres, más tarde renovadas, la Alsacia se atrinchera ante otro avatar de invasión.