El primero de ellos trata la PARTICIPACIÓN NO OFICIAL DE ESPAÑA EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS (1896-1916), y en él se exponen los Juegos Olímpicos de Atenas (1896), París (1900), San Luis (1904), Londres (1908), Estocolmo (1912), y la creación del Comité Olímpico Español.
El segundo capítulo, INICIO DE LA PARTICIPACIÓN OFICIAL (1920-1928), continúa con los Juegos Olímpicos de Amberes (1920), la candidatura de Barcelona para la organización de los Juegos de la VIII Olimpiada, la reconstitución del Comité Olímpico Español, los Juegos Olímpicos de París (1924), la Olimpiada Levantina, los Juegos Olímpicos de Ámsterdam (1928), y el Congreso de la Asociación Internacional de la Prensa Deportiva.
El último capítulo, ASPIRACIÓN DE BARCELONA A LA ORGANIZACIÓN DE LOS JUEGOS OLÍMPICOS. OLIMPIADA POPULAR (1932-1936), se desarrolla a través de la Candidatura de Barcelona para la organización de los Juegos de la XI Olimpiada, los Juegos Olímpicos de Los Ángeles (1932), los Juegos Olímpicos de Berlín (1936), la Olimpiada Popular de Barcelona, y la Candidatura de Barcelona para la organización de los Juegos de la XII Olimpiada.