«Disfruten de la maestría del narrador escocés, de su carpintería de sólido forjado, de su dominio del ritmo, de su ejemplar prosa de diálogo, de su administración de la intriga, de su juego musical de tensiones y resoluciones, dentro de esa sinfonía inacabada o megarrapsodia del tiempo que llamamos Historia», Blas Matamoro, "ABC Cultural".
«Eterna mortalidad es una novela de una solidez que tira de espaldas. Novela fundacional del género, su modernidad reside en su conflicto dramático, servido con impecable dominio de la narración», José Mª Guelbenzu, "El País".