Noa encuentra refugio en un circo alemán, pero debe aprender a realizar acrobacias para pasar desapercibida, y despierta así la animadversión de Astrid, la acróbata principal. Noa y Astrid son rivales al principio, aunque pronto forjan un vínculo muy poderoso. Pero, a medida que la fachada que las protege comienza a debilitarse, Noa y Astrid deben decidir si su amistad es suficiente para salvarse la una a la otra o si los secretos que hay entre ellas lo destruirán todo.