El hilo conductor de estas historias es el príncipe Florizel, personaje posiblemente inspirado en un hijo de María Teresa y José II de Bohemia. El Club de los suicidas nos descubre la existencia de un excéntrico club clandestino destinado a facilitar el paso a la otra vida a sus socios, y El diamante del rajá relata el robo y las posteriores peripecias de una magnífica joya, un diamante precedido de una nefasta historia de traiciones y crímenes.