Con la escritura vigorosa que lo caracteriza, el escritor Horacio Castellanos Moya sume a los lectores en el torbellino de sentimientos encontrados en el que se debaten los protagonistas de esta novela. Emplea para ello varios registros, desde el diálogo mordaz hasta la epístola, pasando por el monólogo interior, y brinda al lector la posibilidad de aproximarse a las complejas relaciones entre los personajes y a la realidad en la que viven desde inesperados puntos de vista.
Desmoronamiento es, en suma, una obra que no deja indiferente y que sacude al lector por la violencia generada tras años de resentimiento.