Pero en estas cartas se hallan también el íntimo intercambio epistolar con sus amigos y familiares de siempre el fiel colega de la Universidad de Basilea Franz Overbeck; el músico Heinrich Köselitz, a quien Nietzsche llamaba Peter Gast y que le ayudaba en la preparación de sus textos casi como si fuera su secretario; el gran historiador Jacob Burckhardt; la maternal amiga wagneriana Malwida von Meysenbug; la hermana y la madre y los agudos diálogos que Nietzsche sostuvo con un nutrido grupo de escritores, pensadores y artistas, con alguno de los cuales se relacionó de manera particular en esos meses de tan intensa producción y cambios tan acelerados: por ejemplo, el intelectual danés Georg Brandes, el dramaturgo sueco August Strindberg, el historiador francés Hippolyte Taine, el músico Hans von Bülow, o su antiguo colega de estudios, el gran orientalista Paul Deussen.