Once relatos cortos cuyos protagonistas son: el sexo, el asesinato y el suspense. Ubicados todos en un ambiente hispano marroquí que el lector irá descubriendo a lo largo de una narración repleta de sorpresas, sobresaltos, sustos y emociones que el autor, inspirado en los grandes creadores del género negro, logra mantener hasta la última línea. No hay asesinos en serie ni grandes criminales ni espías modelos. Son gente ordinaria en busca de la felicidad, que pocos logran alcanzar: en Tánger Alicia contrata a un marroquí para asesinar a su marido multimillonario; en Málaga Ramírez y Lubna viven un desgarrador thriller que termina en tragedia; en una remota aldea del Rif unas serpientes horribles tiñen de pavor a toda la población; en Rabat un cleptómano experto utiliza diferentes identidades para desposeer y mancillar a sus víctimas femeninas; en Marrakech Firdaus intenta suicidarse tras ser violada pero conoce a Rodrigo y la muerte tiene un desenlace conmovedor; en Larache alguien asesina por resentimiento a muchos españoles y no es fácil descubrirlo; en el Estrecho la travesía en pateras por unos pobres emigrantes desentraña crueles verdades sobre las mafias implicadas; Saída, víctima de numerosos ultrajes que la condujeron a la prostitución, abandona España y vuelve a Marruecos, decidida para vengarse, contagiando el sida a todos los que abusaron de ella; en Kenitra Salwa tiene que desenmascarar a un heredero que asesina para quedarse con el pastel; en Tetuán Nadia logra desterrar, mediante el psicoanálisis, un pasado macabro donde es asesinada su madre. El lector está invitado a descubrir, inmerso en lo patético de la narración, ciudades y tradiciones de un país misterioso y exótico pero fiel a lo que siempre ha sido: tierra de hospitalidad, turismo, tolerancia y libertad.