En abril de 1999, once representantes de las mayores empresas alimentarias de Estados Unidos se reunían a puerta cerrada para debatir acerca de la creciente epidemia de obesidad y cómo actuar frente a ella. Una pregunta flotaba en el aire: ¿Ellos eran de algún modo los responsables?
A lo largo de los años, los fabricantes de la industria alimentaria se han disputado la primacía en el sector elevando, cada vez más, las cantidades de sal, azúcar y grasa en los alimentos que producen. Unos ingredientes cuyo uso deliberado han estudiado y controlado metódicamente, basándose en estudios científicos que demuestran que actúan sobre nuestro cerebro proporcionándonos un placer adictivo similar al que generan drogas como la cocaína.
Michael Moss, prestigioso periodista de investigación, dedicó cuatro años de su vida a indagar en distintas compañías entrevistando a científicos y publicistas, entre otros, y visitando laboratorios y departamentos de marketing para descubrir las «tácticas ocultas» que tiene uno de los sectores, en mayor medida responsable de nuestra salud, para engancharnos a sus productos.
Con todo ello, Moss ha escrito este libro en el que describe cómo la industria manipula los alimentos para que nos convirtamos en adictos a sus elaboraciones y que, tras leerlo, hará que te lo pienses dos veces antes de comprar según qué cosas.