El agente del FBI Oliver Vargo decidió consultar los expedientes de sexo para hacerse una idea de cómo sería la mujer más sexy del mundo. Lo que no esperaba era encontrarse con un ejemplo viviente. La bella Peggy Fox lo intrigaba... y, sobre todo, lo excitaba demasiado. ¿Quién era esa misteriosa mujer que parecía tan empeñada en seducirlo?
Peggy necesitaba a toda costa la ayuda de Oliver, pero aquella voz y aquel cuerpo tan sexy la habían pillado por sorpresa. La noche que habían pasado juntos era algo que jamás olvidaría... y que le encantaría repetir. Pero no podía permitir que él supiera todos sus secretos.
Aquella mujer desapareció tan repentinamente como había aparecido, y ahora él debía encontrarla...