El doctor Nick Lancaster no comprendía nada. ¿Qué podría llevar a una mujer guapa e inteligente como la doctora Helen Moore a trabajar en un pueblo remoto y criar ella sola a un niño adoptado?
Él adoraba a su hijo, pero desde luego no había sido elección suya criarlo solo. Había algo que tenía que averiguar fuera como fuera: por qué aquella estupenda mujer había decidido dejar sus sentimientos a un lado al mismo tiempo que estaba haciendo aflorar todos los de él. Después de mucho tiempo, Helen estaba consiguiendo hacerlo sentir por primera vez...