Aquello no era más que atracción física... era imposible que se convirtiera en amor. Kate solo era la amante de un apasionado siciliano, Giovanni Calverri.Y lo único que se suponía que había entre ellos era sexo... Hasta el día en el que todo cambió. El destino los obligó a hacer un alto en su relación y plantearse qué era lo que realmente había entre ellos...