Corría el año 1989 cuando el joven Fran trabajaba como camarero a las órdenes de don Paco; pero el hostelero decide prescindir de sus servicios antes de tiempo por las obligaciones del chico con el servicio militar. Ante esta situación de desamparo económico, siendo el único sustento para su familia el sueldo de Fran, éste, con la insistencia de su amigo Rubén y la aparición de Mary en su camino, decide dar un giro radical a su vida. Así, comienza a ejercer de gigoló, un trabajo que no sólo le proporcionará dinero en abundancia y la posibilidad de conocer mujeres que significarán mucho para él; sino que también será el punto de partida para convertirse en alguien que nunca quiso ser.