Argumento de Regresar a Jesús de Nazaret
«Regresar a Jesús» significa tres tareas fundamentales. En primer lugar, aceptar la humanidad histórica de Jesús como paradigma de nuestro modo de ser humanos: lo que se nos revela en Jesús no es un contenido doctrinal, sino el modo de vivir más humano y humanizador que puede haber, pues responde fielmente a la voluntad de un Dios que solo quiere y busca un mundo más humano. En segundo lugar, es necesario poner en práctica esa praxis concreta de Jesús como realidad última y definitiva: al hacerlo así se está confesando que Jesús es el Mesías, el Cristo de la fe. Por último, «regresar a Jesús» exige compromiso, como él, al servicio no de una religión convencional, sino de la causa del Reino de Dios, el Padre bueno y compasivo; un compromiso que se va concretando en una actuación firme contra las condiciones históricas que obstaculizan su reinado de paz y justicia, y en el desarrollo de una práctica fraterna al servicio de todas las víctimas. De este modo, el Reino de Dios sigue aconteciendo en nuestros días.0