¿Cómo explicar el fenómeno paradójico de la creciente búsqueda espiritual y el imparable declive de la religión institucional? Sin negar el influjo de la secularización y de la (post)-modernidad, el autor plantea una hipótesis de más hondo calado: estamos ante un cambio de época, caracterizado por una transformación de la conciencia. Ese paso de una conciencia mental-egoica a otra transpersonal, revoluciona no sólo nuestras respuestas habituales a las preguntas de siempre, sino las mismas preguntas. ¿En qué consiste exactamente ese cambio de conciencia ? ¿Cómo se plantea en él la pregunta sobre Dios y la salvación? ¿Cuál será el lugar y el papel de las religiones en esta nueva situación? ¿Qué sentido tiene una espiritualidad post-religiosa? Sólo avanzando en la respuesta a estas cuestiones, podremos salir al paso y dar cauce a la búsqueda espiritual de nuestros contemporáneos.