Philip Roth disecciona con hilarante y despiadada inteligencia la era Nixon y sus tejemanejes.
El propósito de Roth en esta obra escrita en los años 70 (antes del escándalo Watergate) es ajustarle las cuentas a Nixon y a su corrupta administración. Y lo hace a través de una sátira política hilarante y desmadrada en la que podría hallarse un claro paralelismo con la actualidad. Así, los boyscouts se rebelan contra el presidente, existe un eje del mal que incluye a Jimmy Hendrix y Jane Fonda, e incluso una guerra sucia, que Nixon declarará al «gobierno pornográfico de Dinamarca» por apoyar la insurgencia#