En Los botes del «Glen Carrig» (1907), primera novela publicada por Hodgson, cuyo largo subtítulo descriptivo anticipa el estilo dieciochesco de esta narración, relata en forma de diario las desventuras de los supervivientes del barco Glen Carrig, que, tras un naufragio sufrido en los ignotos mares del sur, arriban con los botes salvavidas a una costa desconocida, y más tarde a una isla misteriosa, para descubrir que, lejos de ser refugios seguros, más parecen territorios extraídos del Infierno de Dante...