Argumento de Las Moradas
Al hilo de la vida (como dice uno de sus versos) se han ido escribiendo estos poemas. El primero en ver la luz data de marzo de 1987, en Granada, y se titulo La casa. Resulta, pues, muy representativo del conjunto que está articulado en torno a esa única figuración desplegada en multitud de variantes e inflexiones. Todas ellas, a lo largo de estos treve años de escritura, van incorporando la existencia y el paso del tiempo a una voluntad -ya presente en otros libros de su autora- de integrar la tradición en ese hoy que algunos llaman modernidad. Ello se intenta aquí evocando un libro mayor de nuestra mística y una figura femenina de ingente y gigantesca talla en nuestra literatura y se hace de una manera original e iconoclasta con un lenguaje poético totalmente personal y reconocible donde reaparecen figuras y recursos de un imaginario muy peculiar que, estando presentes en sus libros anteriores, encuentra en éste otra forma de manifestación que abunda -al desvelarla un poco más- en la absoluta coherencia y madurez de esta obra poética cuya entrega anterior (Árboles en la música, 1995) tuvimos el gusto de ofrecerles en esta misma colección.1