El estallido de la Segunda Guerra Mundial empujará a Kurt Crüwell, un joven sastre alemán, a vivir una experiencia tan radical como insólita. Metáfora de un siglo trágico, la existencia de Kurt se transformará en un vertiginoso viaje a las raíces del Mal, identificado en está intensa novela con la cosmovisión del nazismo, pero también en un conmovedor ejemplo de la capacidad del amor para expiar el dolor del mundo y en una originalísima reflexión a propósito de la grandeza y miseria del cuerpo humano.