Estos escritos guardan un tono positivo, de resurrección. Nos halan de la Pascua, de "hacer memoria", de caminar siempre de nuevo, de salir, de evangelización... de Esperanza.
El autor nos invita a dejarnos seducir por la certeza de la promesa: "yo estaré con vosotros hasta el fin de los tiempos". No tengamos miedo. "¿Miedo a qué? - dice Francisco - . No tengas miedo a la Esperanza... porque la Esperanza nunca defrauda".