?No todas las apariencias son verdaderas, la idea sensible no es lo mismo que la sensación? nos dice Aristóteles. No todo es igual visto desde un estrato cultural, que visto de una capa o nivel del ciudadano simple. No ve en una cosa lo mismo una persona enferma que una persona sana, ni ve lo mismo una cosa de cerca que una persona de lejos. ¿Qué es la verdad? ¿Lo que vemos o lo despierto que vemos dormidos? ¿Es la vista la que juzga o es el gusto? Puedes oír música en un momento de tu vida y sonarte o gustarte de distinta forma en otro momento de la misma. Aquí el autor nos enseña en sus poemas, heridas abiertas, sensaciones, esencias de la vida que transcurre, de mundos opuestos y coge el alma de la vida en momentos de ser en tanto que ser y, cada uno lo juzgará a su modo y a sus circunstancias por las que la vida lo ha formado y por lo tanto, todo es relativo. Aquí hay cultura, cadencia y sobre todo sensaciones y sensibilidad en un lenguaje lleno de belleza. Simón Hernández, gran poeta y amigo del autor , dice que ?...hay algo especial en la poesía de este autor y, es el hacer de la necesidad un sentimiento tanteando con su mano el alma de cualquiera que lo conozca...? Antonio Monzonís Guillén