Testimonios de pasión, amor y arraigo en tierra argentina.
Un mosaico de heroísmos y epopeyas cotidianas que bien puede simbolizar otros miles de historias desconocidas, como, quizá, la de nuestros propios abuelos.
Entre las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del XX, más de seis millones de personas llegaron a la Argentina. Muchas probaron fortuna y regresaron pronto a su tierra, pero más de la mitad decidió afincarse y echar raíces en el país: son la materia prima que conformó una parte importante de nuestra identidad.
En sus valijas trajeron la añoranza de afectos dejados atrás, la tristeza de no saber si volverían alguna vez a su tierra, la incertidumbre ante lo desconocido y una enorme carga de esperanzas y expectativas. Suizos, saboyanos, piamonteses, italianos, franceses, alemanes del Volga, galeses, escoceses, vascos, gallegos, irlandeses, polacos# el trabajo de todos ellos está en nuestros campos y nuestras ciudades, su esfuerzo hizo crecer el país que sería la tierra de sus descendientes.
Lucía Gálvez reunió estas historias de vida, narradas con orgullo por los propios protagonistas, sus hijos o sus nietos.