Enseña a la gente dónde y cuándo construir una tumba o erigir una casa con objeto de augurar así, para todas las personas implicadas, una felicidad y una prosperidad perdurables.
Basado en una concepción emocional de la naturaleza y en la creencia de que el Cielo y la Tierra se influencian mutuamente, este antiguo sistema geomántico chino intenta poner en armonía todas las cosas con su entorno.
El hombre, a caballo entre el Cielo y la Tierra, tiene por objeto elevar lo que está abajo y hacer bajar lo que está arriba.