Yo es muy ordenada y le encantan los relojes y ser puntual. No le gustan las sorpresas y apenas tiene amigos. Un día llega un pariente con su perro (a Yo no le gustan los perros) y alteran toda su ordenada vida con sus malabares y su música y su afición a jugar, a pasear, a divertirse. Un álbum que invita a compartir con los demás, aunque no gusten de las mismas cosas, a entender otras formas de ser.