Nunca tanta vitalidad se había concentrado en tan pocas páginas.(Paolo Scolari, Max di Milano)
Sí, es un poco perversa, un tanto descarada, muy sucia.... Es perfecta! Es la maldita cosa que uno espera de un verdadero escritor. (Patricia Linares, VIP Magazine)
Censurada, temida y odiada, Erase una vez el amor pero tuve que matarlo ha corrido la misma suerte de su autor pero como él, ha sobrevivido a la estupidez y las balas. Efraim Medina Reyes es el más brillante, peligroso y sagaz escritor de la actual narrativa colombiana, y en esta novela de muestras de eficacia, sensibilidad sin límites (entendida como capacidad de moverse entre lo sublime y lo vulgar) y coraje.