El jefe tenía amnesía... y estaba convencido de que Jocelyn era su esposa.
Poco podía imaginar el director general de la empresa que aquella mujer que lo miraba con cara de amor no era otra que su secretaria, Jocelyn Stemic. Cuando empezó a recuperar la memoria, Lucas Forester se dio cuenta de que nada de lo que recordaba hacía pensar que Jocelyn fuera su esposa... Lo que sí sabía era que deseaba ser el esposo de aquella encantadora dama por encima de todo.
Jocelyn no tenía otra opción que seguir adelante con aquella charada; después de todo, ser la esposa de Lucas era una fantasía hecha realidad. Lo duro llegaría cuando tuviera que volver a su solitaria vida después de haber probado el amor de su jefe y de que él descubriera que no era la mujer que creía...