Apasionante y adictiva, EL SOMMELIER, narra dos historias que se unirán en el tiempo, donde el amor, la tragedia, las drogas o la prostitución coactiva de mujeres indefensas e invisibles, son elementos cotidianos del mundo que nos ha tocado vivir, todo ello rodeado del escenario más seductor, la elaboración, cata y degustación del buen vino. Durante la noche de San Juan, la trama de la novela entremezcla la época actual y la pasada del protagonista, y junto a la narración en dos tiempos, se combinan elementos haciendo la lectura más ágil, dando mayor realismo a la historia y sirviendo en muchos casos al lector, como complemento a lo que ya ha leído o va a leer en las próximas páginas. De vez en cuando la vida? te lo da todo, te besa, te quiere, te mima y es tan maravillosa, que cada día nos regala, sueños, amigos, amores o hijos. Pero también, de vez en cuando la vida, lo que te da, te lo quita de cuajo y no es broma. Los sueños tan deseados y muchos de ellos hechos realidad, se evaporan, desaparecen, como si de un hechizo perverso se tratase. Tomás Garceso, el que antaño fuera un prestigioso y afamado sommelier y ahora un pobre borracho manchado de soledad, al no saber afrontar la vida de otra manera. Antes de terminar la noche de San Juan, -noche de fiesta y de hogueras-, tendrá la oportunidad de redimir su pasado. La búsqueda de una vida y un futuro mejor, implica viajar al primer mundo. La bella Gala, con apenas veinticinco años deberá cruzar fronteras y desiertos, soportando penalidades y malviviendo en las rutas que utilizan las mafias. Zonas controladas por los tratantes de personas y donde a mujeres indefensas como ella, se les requiere un peaje para pasar a la península. A falta de dinero, su cuerpo será la moneda de cambio