Tres mujeres comparten piso en Soria. Cada una ha llegado a la ciudad por diversos motivos, pero las tres comparten la desesperación y la necesidad de ser escuchadas en un país que no es el suyo. Una noche deciden pedir ayuda a la única persona en la que confían, la asistente social, Montse. Allí comienza la larga noche en que deben enfrentarse a Said, cuyo ojo observa atentamente cómo intentan deshacerse de él sin dejar huellas. Esta historia tiene como telón de fondo la realidad de muchos inmigrantes, de sus luchas, de las situaciones extremas y desiguales a las que tienen que hacer frente y, concretamente, es la realidad de muchas mujeres que se ven maltratadas, engañadas y abusadas. La autora crea un marco muy real, dando saltos espacio-temporales para presentarnos la situación actual y el pasado de cada una de ellas haciendo que el lector se involucre en la trama y se sienta muy cerca de sus personajes. Con mucha agilidad, cada página va reforzando la intriga creada desde el principio de la novela y mantiene la tensión hasta el final de la obra.