Para acercarse a la antigua propietaria de Holmlea, Martha, ayudada de Niall y Saul, únicos amigos de la anciana durante sus últimos años de vida, tendrá que ir atando cabos a través del contenido de la casa: cuadros, fotografías, objetos personales, y también de las memorias escritas por la difunta anciana y legadas a Saul, para poder finalmente sacar a la luz el pasado de esta misteriosa mujer.