En un apacible pueblo de la meseta palentina, se cuenta que existe una seta cuya belleza y sabor solamente son comparables a sus propiedades tóxicas. Esas mismas voces aseguran que nadie ha podido verla desde hace siglos. Sin embargo, esta circunstancia está a punto de variar como consecuencia de una trama de celos, amistad y vanidades. Con una asombrosa sencillez, Ramón Pérez Aguilar nos relata, en este trhiller costumbrista, las vidas de Nicolás Quintanilla, un humilde agricultor que vive enamorado de la persona equivocada desde su más tierna infancia, y la de su fiel amigo, un retrasado mental que haría cualquier cosa por él. Una tercera persona, un actor que desea desposar a la enamorada de Nicolás, removerá las tranquilas aguas del cauce de la vida del pueblo.