A partir de los años sesenta del pasado siglo XX existe en Europa una concienciación de lo que fue El Camino de Santiago, como parte de la historia de su integración comunitaria. España, en medio de un profundo cambio estructural, se percata y conciencia de ello, instrumentalizándolo como un posible ?Polo de Desarrollo? de su naciente sector turístico, pues el Camino es un espacio en el que se conjuga, entre otras muchas cosas, arte y ocio, que son las puertas abiertas que nos deja en aquel momento el Mercado Común Europeo. Este libro desarrolla una ?historia perdida?; redescubre, desempolva y analiza pormenorizadamente los trabajos de recuperación de la Ruta Jacobea en aquella década tan decisiva. Un tema inédito hasta ahora en el ámbito del estudio de las peregrinaciones compostelanas, y que desde luego hace que la Historia no nos deje indiferente