Estas palabras de Javier Urra, autor del éxito editorial , constituyen la puerta de entrada a un libro extraordinario que sintetiza, en forma de aforismos o sentencias, su pensamiento acerca de la educación, que no se trata de una ciencia, sino de un arte que nos obliga a desplegar toda nuestra sensibilidad.
Porque somos nuestra infancia, porque siempre nos queda la memoria, la imaginación y una pizca de fantasía, nos empeñamos en alcanzar lo imposible: garantizar a nuestros hijos, a nuestros nietos, una infancia plena de felicidad.