La vida de una locutora de radio, que responde cartas sentimentales en antena, y las de varios de sus oyentes se entrecruzan en una historia de amor, desamor, malos tratos y soledad situada en la Barcelona de finales del franquismo e inicio de la democracia.
Cuando Aurora se convierte en la nueva voz de Elena Francis se encuentra con una gran responsabilidad. Por un lado, debe impedir que Elisa, una joven de diecisiete que ha anunciado su intención de quitarse la vida, se suicide.
Por otro, llenar la vida de personas solitarias como Germán, quien escucha el consultorio a diario.
Lo que nadie sabe es que Aurora es tan infeliz como muchos de sus oyentes y que acaban de romperle el corazón. Un día se pregunta dónde van a parar las cartas que no llegan a sus manos, y descubre que las queman.
Muchas muestran una realidad fea, llena de violencia doméstica y represión política que los anunciantes no quieren que se asocie al programa. Aurora, indignada, se lleva todas las cartas que puede a su casa para responderlas en sus horas libres.
Tras muchos años de vacío emocional, encuentra un sentido a su vida.