Es la crónica de aquellos años intensos y terribles, que cambiaron el rumbo de la Historia, lo que nos narra Mrs. Elliott de modo privilegiado y emotivo en este Diario de mi vida durante la Revolución Francesa, en un crescendo que va de la batalla en las calles de París a la caza y ejecución de nobles o al terrible recorrido de las turbas por la ciudad, recuerdos de una testigo de excepción, a un tiempo monárquica (sufrió prisión durante año y medio por ello bajo la sombra de la guillotina) y amante del duque de Orléans (Felipe Igualdad, para los revolucionarios), uno de los principales cabecillas de la Revolución que acabaría siendo guillotinado también. Además del infortunado duque, por estas vívidas memorias transitan también Robespierre, Madame Buffon, Lafayette, la futura emperatriz Josefina, Sieyés, el general Hoche y muchas otras figuras de relieve para la historia de Francia.