Es la historia de dos personajes, Toni y Pepín a quien el destino se empeña en unir, en una trama en la que se mezclan la amistad, el desencuentro, la intriga, la pasión y los celos. Amigos desde la infancia, la vida de los protagonistas se ve marcada por el devenir de los acontecimientos en Cuba y transcurre en una sociedad que terminará rigiéndose por una única ley: la necesidad de sobrevivir, que despoja al hombre de todo ropaje ético y le obliga a enfrentarse ante sí mismo sin máscaras. Esta ley les acompañará en su periplo vital, desde las tranquilas playas de Varadero, hasta la Facultad de Medicina de La Habana y Giado, un pequeño pueblo libio a las puertas del desierto del Sahara, donde Pepín encuentra la muerte en extrañas circunstancias. Este acontecimiento desencadena una reacción insospechada en Tony, que decide vengarse de quien considera responsable de la muerte de su mejor amigo. Una sesión de Ouija desvelará con el tiempo la verdad de lo sucedido. El contrapunto es la mirada divertida, tierna e irónica sobre Cuba y sus contradicciones, que aligeran la historia y atrapan al lector. Escrita en un lenguaje popular, la jerga que se habla en la calle, la novela se acompaña de un glosario de términos que ayudarán al lector a sumergirse en la realidad cubana.