Este libro estudia la realidad de la docencia actual en las distintas etapas de forma constructiva porque toca volver a ilusionar a los docentes desde el compromiso de su magisterio: la disciplinada libertad de las aulas, el gozo de los aprendizajes, el buen entendimiento del orden y la solidaridad de los maestros hacia unos niños que serán como un río que fluye continuamente entre sus manos. Los momentos subyugantes de las escuelas tienen que ser constantes, y el maestro un mago que, con la palabra, no sólo convence sino que, además, asombra y estimula. Es el momento de apoyar a los que, aún constreñidos por la legislación, luchan por defender su parcela de libertad en el aula porque son conscientes de que el magisterio es una auténtica vocación.