Tradicionalmente siempre han sido los grandes hombres quienes han logrado reunir a su alrededor a artistas, literatos, analistas o historiadores capaces de glosar obras, biografía, talento o personalidad para conseguir que el afamado trascienda los tiempos más allá de su muerte. Este legado forma parte del patrimonio histórico cultural de la humanidad. Bebemos de la sabiduría de los que estuvieron aquí antes que nosotros y nos maravillamos de las obras que estos grandes hombres llevaron a cabo. También en este libro hemos sido varios quienes hemos aportado un poco o un mucho de nuestro arte para lograr que, haya sido un perro, un simple perro, el que pueda trascender más allá de quienes le conocimos. Ciro, el guardián del Gurugú y el resto de relatos incluidos en este libro que ahora tienes en tus manos, querido lector, harán las delicias de los amigos de los animales que se decidan a dar un paseo por sus páginas, leer sus cuentos y emocionarse con las fotos, dibujos y música de unos locos unidos por la mirada inquieta de este pequeño licaón que, aburrido de recorrer las calles de Sigüenza y de montar guardia en la taberna del Gurugú, se decidió un día a dar un paso más allá para conocer nuevos horizontes. Literatura, música, fotografía, cine o pintura han sido algunas de las artes que se han sentido inspiradas por esa musa perruna de mirada desigual. Alberto y Belén, Belén y Alberto han llevado a buen puerto este proyecto cuya única pretensión es contar la historia viva de un perro, un pequeño licaón de orejas erguidas que nunca dejó indiferente a nadie, Solamente esperamos que este libro tampoco te deje indiferente a ti. Sus páginas se han escrito mezclando a partes iguales sonrisas, lágrimas y melancolía. Ciro, quienes te conocimos no podemos olvidarte.