Este Catecismo político de la Federación Mexicana se inspira en cierta folletería que conoció gran auge durante la revolución francesa, y que tuvo su eco también en la América del siglo XIX. Es, además, una pieza de gran singularidad en la obra del agudo y preciso ensayista José María Luis Mora (1794-1850), considerado como uno de los grandes autores en el repertorio del siglo XIX. Las páginas de este libro -publicado originalmente en 1831- ofrecen algo más que una sencilla y precisa síntesis de las convicciones políticas de Mora en torno a la voluntad y el bien general, la opinión pública, las partes constituyentes de una república representativa y su forma de gobierno. Este libro se puede considerar, además, como un ensayo de Mora, en el que junto a su claro deseo de explicar la Constitución de 1824 al mayor número de lectores, se aprecia con nitidez el deseo de dotar a la joven república de México de un orden racional y justo, en medio del enorme caos político, económico y social que acompañó su nacimiento y construcción como nación.