Este libro ha sido donado a la Iglesia, para ayudar a terminar de amortizar su reparación. Yo nací en Virgen, 9 (muy cerca de la Iglesia). Ya de muy niño, a los 7 años de edad, era monaguillo, pues mi querido e inolvidable Padre, tenía una gran ilusión porque sus hijos fueran educados dentro de las normas de la Fe cristiana. Para tal fin ya (comento en algún libro anterior), que procuraba tener buenas relaciones con los Sacerdotes de aquellos años. Por las visitas tan continuadas, casi diarias, llegué a tomarle cariño igual que la mayoría de los Pedroteños a la Iglesia por considerarla imprescindible como nuestra segunda Casa