Todo el poemario mantiene un ritmo rápido y marcado, para dar relevancia a versos que nos dicen más de lo que dicen sus palabras, que es en definitiva una de las bondades de la poesía, de la buena poesía. La intención del poeta nos va envolviendo verso a verso, como en una espiral, como una tela de araña que nos atrapa con su lectura, un síntoma inequívoco del interés del libro, que considerado dentro de la trayectoria del autor, me permite decir que este poemario es un escalón importante en su ascensión poética, camino de ese ?cielo y un tiempo / de alas cargadas de sueños?, que aparece en el título del libro que comentamos. Recojo sus palabras: Subiendo a la cumbre estoy? Para quedar en lo alto con la mirada en los cielos, de estrella en estrella roja?.. ?Con la mirada en los cielos?, una buena acción para los ojos de un poeta, Francisco Fenoy ha conseguido una poesía bella y consciente, fondo y forma que se enlazan a través del ritmo poético, belleza y mensaje, historia y futuro, ?Poesía que se hace signo/ en la edad noble del viento?? la que nos ofrece en este su último poemario, además, del placer de su lectura. Del prólogo de Milagros Salvador