Este trabajo busca evidenciar que es necesario que tanto en España como en América Latina se aliente más decididamente una cultura proclive al conocimiento, tanto a su generación, como a su difusión y su asimilación, y la necesaria repercusión de todo ello en el mercado. Para lograrlo, el camino es formar más y mejores empresarios, y mejores empresas, en los términos que en su día imaginó Schumpeter, y que las Administraciones (v.g. los gobiernos, los organismos comunitarios y las instituciones internacionales) apoyen con mayor contundencia todo lo relacionado con la tan anunciada, pero pocas veces concretada política de I+D.